En los últimos diez años, Irlanda ha visto un aumento significativo en el número de estudiantes internacionales que eligen este país como su destino para aprender inglés. ¿Te gustaría saber qué hace de Irlanda un lugar tan atractivo para estudiar?
¿Te preguntas por qué Irlanda es el destino perfecto para estudiar y vivir una experiencia inolvidable? Aquí te damos 12 razones que te motivarán a hacer las maletas.
Irlanda es un gran lugar para vivir: Naciones Unidas clasifica a Irlanda entre los 20 mejores países del mundo para vivir, según su Índice de Calidad de Vida, y le otorga el octavo lugar en el Índice de Desarrollo Humano.
Enfoque educativo orientado a un mundo globalizado: Con una tradición educativa que se remonta a siglos atrás, Irlanda se ha adaptado a la economía global, ofreciendo educación de alta calidad y precios accesibles, especialmente comparado con otros destinos como Australia, Canadá o Reino Unido.
Economía competitiva y en crecimiento: Irlanda ha captado la atención de grandes empresas internacionales como Google y Facebook debido a su robusta economía, lo que la convierte en un excelente lugar para combinar estudios y trabajo.
Los estudiantes internacionales son bienvenidos: El gobierno irlandés apoya a los estudiantes internacionales, con más de 120,000 estudiantes de todo el mundo que llegan cada año. Irlanda asegura una experiencia educativa de calidad y una bienvenida cálida.
Posibilidad de trabajar mientras estudias: Si eres ciudadano de la UE, puedes trabajar sin restricciones. Para otros, dependiendo de la duración de tu estancia y tu nacionalidad, hay opciones como el IRP y visados de estudiante que permiten trabajar mientras estudias.
Buenas condiciones laborales: Irlanda ofrece uno de los salarios mínimos más altos de Europa, lo que asegura una buena calidad de vida incluso para trabajos no cualificados.
Riqueza histórica y cultural: Con una historia que se remonta a milenios, Irlanda es rica en cultura y tradiciones. La influencia celta es palpable en su arte, música y vida diaria.
Una sociedad acogedora: Los irlandeses son conocidos por su hospitalidad y humor. Al vivir en Irlanda, sentirás esa calidez y te integrarás fácilmente en la comunidad local.
Paisajes espectaculares: Conocida como la “isla esmeralda,” Irlanda ofrece paisajes impresionantes, desde costas escarpadas hasta verdes colinas y valles.
Harás amigos de todo el mundo: Estudiar en Irlanda te permitirá conocer a estudiantes de todas partes del mundo, creando lazos que durarán toda la vida.
Variedad de planes de ocio y actividades: Irlanda tiene una oferta inagotable de actividades, desde festivales hasta excursiones en la naturaleza y visitas a sitios históricos.
Facilidad para viajar por Europa: Irlanda es un excelente punto de partida para explorar Europa. Con vuelos baratos, podrás viajar y conocer otros países durante tu estancia.
Estas razones demuestran por qué vivir en Irlanda es una experiencia que va más allá de los estudios, ofreciéndote una vida plena y rica en oportunidades.
El mercado laboral en Irlanda es bastante accesible, con una tasa de desempleo en torno al 5%, lo que facilita encontrar trabajo tanto en sectores cualificados como en servicios, como cafeterías, restaurantes y tiendas, populares entre estudiantes internacionales.
El salario mínimo en Irlanda es de 10,10€ por hora, lo que se traduce en aproximadamente 1.600€ al mes para un trabajo a tiempo completo.
Para los puestos cualificados, los salarios anuales pueden oscilar entre 30.000€ y 70.000€, con las mejores remuneraciones en áreas como informática, ingeniería, sanidad, ventas y finanzas. Además, la presencia de grandes empresas tecnológicas, como Facebook y Google, que han establecido sus sedes europeas en Irlanda, ha incrementado significativamente las oportunidades laborales en tecnología y ciencia.
Tu nivel de inglés será clave para acceder a mejores empleos. Un nivel avanzado es necesario para puestos más especializados, mientras que un nivel intermedio suele ser suficiente para trabajos menos cualificados.
Si estás pensando en Irlanda como destino para estudiar y trabajar, es importante también considerar los costes de vida para planificar adecuadamente tu experiencia.
Te esperamos en Irlanda
Con los brazos bien abiertos.
¿Empezamos a dar forma a tu viaje?
Vivir en Irlanda implica un coste de vida moderado en comparación con otros destinos populares para estudiar inglés. Aunque es más económico que vivir en Reino Unido, los gastos en Irlanda son más altos que en Malta. Sin embargo, si planeas trabajar mientras estudias, los salarios en Irlanda te permitirán cubrir estos gastos sin dificultad.
El coste de vida en Irlanda varía según la ciudad, el tipo de alojamiento y tus hábitos personales. En promedio, se estima que necesitarás entre 800 y 1.200€ al mes para vivir cómodamente.
Aquí te desgloso los gastos más comunes:
Alojamiento: Una habitación individual suele costar entre 500 y 600€ al mes. Compartir una habitación puede reducir estos costes, y hay opciones más económicas como alojarse con una familia local o en residencias de estudiantes.
Alimentos: El gasto mensual en alimentos se sitúa entre 200 y 300€.
Transporte: Un abono mensual de transporte cuesta aproximadamente 100€, aunque caminar o andar en bicicleta puede ahorrarte este gasto.
Teléfono e Internet: Los planes básicos comienzan desde 20€ al mes.
Ocio: Si disfrutas de salir y realizar actividades, calcula un gasto adicional de entre 250 y 300€ al mes.
En total, puedes esperar gastar alrededor de 835€ al mes en lo básico. Según el Consejo Irlandés de Estudiantes Internacionales (ICOS), vivir en Dublín puede costar aproximadamente 10.000€ al año, siendo el alojamiento el mayor gasto. Recuerda que estos cálculos no incluyen el coste de tus estudios.
Los requisitos para residir en Irlanda varían dependiendo de tu nacionalidad y el tiempo que planeas quedarte en el país. A continuación, agrupamos los requisitos según las distintas nacionalidades:
Si tienes pasaporte de un país de la Unión Europea o Suiza, la entrada y salida de Irlanda es libre, sin necesidad de solicitar visado o el IRP (Irish Residence Permit). Puedes vivir, estudiar y trabajar en Irlanda sin restricciones. El único requisito es contar con un pasaporte válido.
Los ciudadanos de Chile, México y Argentina no necesitan un visado para entrar a Irlanda, pero sí deben estar matriculados en un curso de inglés. Los requisitos dependen de la duración de la estancia:
Estancia hasta 90 días:
Nota: Este visado no permite trabajar.
Estancia superior a 90 días:
Nota: Con el IRP, podrás trabajar 20 horas por semana durante el curso y 40 horas en vacaciones.
Los ciudadanos de Colombia, Perú y Ecuador necesitan un visado para entrar a Irlanda. Dependiendo de la duración de su estancia, deberán cumplir con los siguientes requisitos:
Estancia hasta 90 días:
Nota: No permite trabajar.
Estancia superior a 90 días:
Nota: Con la visa de estudiante y el IRP, podrás trabajar 20 horas por semana durante el curso y 40 horas en vacaciones.
Si estás pensando en mudarte a Irlanda, las ciudades más recomendadas para estudiar y trabajar son Dublín, Galway y Cork. Cada una de ellas ofrece una experiencia única, con ventajas que las convierten en los destinos preferidos por estudiantes internacionales.
Dublín, la capital de Irlanda, se sitúa en la costa este del país. Es la ciudad más grande y un epicentro tanto para la educación como para el empleo. Con una población de alrededor de 600,000 habitantes, Dublín es conocida por su ambiente acogedor y su vibrante estilo de vida.
La ciudad atrae a estudiantes de todo el mundo gracias a su prestigio académico y las numerosas oportunidades de trabajo. Además, Dublín es famosa por su vida social activa, con una gran variedad de pubs, eventos culturales, y parques como Saint Stephen’s Green, donde los estudiantes pueden relajarse y disfrutar del entorno.
En el noroeste de Irlanda, Galway se destaca por su rica vida cultural. Fue nombrada Capital Europea de la Cultura en 2022, un reconocimiento a su vibrante escena artística y de entretenimiento. Galway es conocida por ser más asequible en comparación con Dublín, lo que la convierte en una opción atractiva para quienes buscan un estilo de vida más económico.
Además de su ambiente multicultural, Galway alberga importantes instituciones educativas y ofrece un entorno que combina lo mejor de la modernidad con un toque de tradición irlandesa.
Cork, la segunda ciudad más importante de Irlanda, está situada al suroeste de la isla. Es un destino popular entre estudiantes internacionales debido a su excelente calidad educativa, menores costes de vida en comparación con Dublín, y una vida social activa con muchos festivales y eventos.
Cork es también un centro empresarial en crecimiento, con la presencia de grandes compañías como Apple, Pepsi y Amazon. Esto la convierte en un lugar ideal no solo para estudiar, sino también para encontrar oportunidades laborales en diversas industrias.
Antes de explorar las diferentes opciones de alojamiento que puedes encontrar en Irlanda, es importante que sepas que Hey Move Away te brindará asistencia para encontrar alojamiento en tus primeros días en el país. Además, muchas escuelas ofrecen la posibilidad de hospedarte en sus residencias de estudiantes o te apoyan en la búsqueda de una familia irlandesa que te acoja durante tu estancia.
La mayoría de las escuelas en Irlanda cuentan con residencias de estudiantes. Si decides optar por esta modalidad, es recomendable que reserves con al menos 4 a 6 meses de antelación, ya que estas plazas suelen ser muy solicitadas.
Una de las ventajas de las residencias de estudiantes es su ubicación céntrica, generalmente a pocos minutos a pie de la escuela, lo que te permitirá ahorrar en transporte y llegar a tiempo a tus clases.
Estas residencias ofrecen diversas opciones, desde habitaciones individuales hasta apartamentos compartidos con otros estudiantes. En los apartamentos, es común que cada estudiante tenga su propio dormitorio mientras comparte las áreas comunes como la cocina, el baño y la sala de estar.
Por lo general, se pide el pago adelantado del alojamiento, junto con un depósito de fianza que se reembolsa al finalizar tu estancia si todo está en orden. Los servicios como agua, electricidad, calefacción e internet suelen estar incluidos en el precio, aunque cada residencia puede tener condiciones específicas. Hey Move Away te proporcionará toda la información que necesites y te ayudará a reservar tu lugar en la residencia de tu escuela.
Conocido como homestay o digs, este tipo de alojamiento te permite sumergirte en la cultura irlandesa y mejorar tu inglés rápidamente. Una familia irlandesa te acoge en su hogar a cambio de una tarifa, ofreciéndote una habitación privada y acceso a las demás áreas de la casa. Normalmente, este tipo de alojamiento incluye dos comidas diarias (generalmente desayuno y cena) y los servicios básicos como calefacción y luz.
Esta opción es económica y está bien regulada, lo que la convierte en una excelente alternativa para estudiantes internacionales.
Alquilar un apartamento es otra opción, con dos modalidades principales: alquilar todo un apartamento y subarrendar habitaciones para cubrir los gastos, o alquilar una habitación en un apartamento compartido. Esta última es muy común y te ofrece mayor libertad y privacidad.
El coste y la calidad de los apartamentos pueden variar según la ciudad y el barrio que elijas. Los pagos de alquiler se realizan mensualmente, y es común que se solicite una fianza equivalente a un mes de alquiler. Esta fianza se te devolverá al finalizar el contrato, siempre que no haya daños en la propiedad.
Consejos útiles para alquilar un apartamento en Irlanda:
Estas opciones de alojamiento en Irlanda te ofrecen una variedad de alternativas para adaptarse a tus necesidades y presupuesto mientras estudias y vives en este vibrante país.
El clima en Irlanda es de tipo oceánico, lo que significa que es relativamente templado en comparación con otros países en la misma latitud. La temperatura media anual en las principales ciudades del país ronda los 10°C.
El invierno en Irlanda se extiende desde noviembre hasta enero. Durante esta estación, las temperaturas suelen oscilar entre 0º y 8ºC. Aunque los meses más fríos, como enero y febrero, pueden experimentar temperaturas por debajo de los 0ºC, la nieve en las ciudades es rara. Sin embargo, la lluvia es bastante frecuente, por lo que un buen paraguas es esencial. También es común encontrar niebla, especialmente en las zonas costeras.
La primavera en Irlanda abarca los meses de febrero, marzo y abril. Las temperaturas en esta época varían entre 8 y 12°C, con una media de 10°C. Abril es generalmente el mes más agradable, ideal para disfrutar de actividades al aire libre.
El verano en Irlanda, que incluye los meses de mayo, junio y julio, es moderadamente cálido. Las temperaturas medias en julio y agosto, los meses más cálidos, rondan los 19°C, aunque en días excepcionales pueden llegar hasta 30°C. A pesar de ello, las nubes y alguna que otra lluvia ligera no son inusuales.
El otoño irlandés, que se produce en agosto, septiembre y octubre, presenta temperaturas que van de 3 a 10°C. Esta estación es bastante similar al invierno, con días frescos y un clima que invita a abrigarse.
Si te estás preparando para vivir en Irlanda, es importante empacar sabiamente. En un solo día, el clima puede variar significativamente, por lo que es recomendable vestirse con capas. Por ejemplo, en primavera y verano, una camiseta, un suéter ligero y una chaqueta deberían ser suficientes. Durante el otoño e invierno, es esencial un buen abrigo.
No olvides llevar ropa impermeable y un paraguas, ya que la lluvia es una compañera constante en Irlanda. Además, unos zapatos cómodos serán imprescindibles para disfrutar de las excursiones y actividades al aire libre que Irlanda tiene para ofrecer.
Irlanda es un país lleno de maravillas naturales, historia fascinante y cultura vibrante. Aquí te compartimos una selección de lugares imperdibles que debes visitar durante tu estancia.
A solo una hora de Dublín, las montañas de Wicklow son un escape perfecto hacia la naturaleza. Este espectacular sistema montañoso te ofrece la oportunidad de disfrutar de aire puro y vistas increíbles de lagos, picos y bosques, todo ello enmarcado por la impresionante naturaleza irlandesa.
A solo una hora de Dublín, las montañas de Wicklow son un escape perfecto hacia la naturaleza. Este espectacular sistema montañoso te ofrece la oportunidad de disfrutar de aire puro y vistas increíbles de lagos, picos y bosques, todo ello enmarcado por la impresionante naturaleza irlandesa.
Los acantilados de Moher son uno de los destinos más emblemáticos de Irlanda. Con una altura que alcanza los 200 metros, estos acantilados ofrecen panorámicas inigualables del Océano Atlántico. Es un lugar que, sin duda, te dejará sin palabras.
La Calzada de los Gigantes es una formación geológica única en el condado de Antrim. Esta playa, formada hace millones de años por el enfriamiento de la lava volcánica, es conocida tanto por su belleza como por las leyendas que la rodean. Además de admirar el paisaje, podrás disfrutar de los atardeceres más espectaculares y escuchar las fascinantes historias de los lugareños.
Ubicada en St. James’s Gate, la Guinness Storehouse es una parada obligada para los amantes de la cerveza. Este museo, que antes fue una fábrica, te permitirá conocer la historia de Guinness y, al final de la visita, disfrutarás de una pinta de una de las cervezas más famosas del mundo.
La Península de Dingle es otro lugar que no puedes dejar de visitar. Camina por Inch Beach hasta los acantilados de Wild Atlantic Way y contempla las impresionantes vistas de las islas Aran. Esta experiencia te permitirá conectar con la naturaleza irlandesa en su máxima expresión.
Si te fascina la historia del Titanic, entonces Cobh es un destino imprescindible. Este pequeño puerto fue el último lugar donde el Titanic atracó antes de su fatídico viaje. Aquí, podrás visitar el museo del Titanic y sumergirte en la historia que aún perdura en la memoria de los lugareños.
Estas son solo algunas de las maravillas que Irlanda tiene para ofrecerte. Cada uno de estos lugares te permitirá descubrir la esencia del país y vivir una experiencia inolvidable.
Reserva un alojamiento temporal: Para evitar estafas o posibles decepciones, lo mejor es reservar un alojamiento solo para los primeros días y buscar tu hogar definitivo una vez que estés en Irlanda.
Adaptadores de corriente: La electricidad en Irlanda es de 230V. Si planeas llevar dispositivos electrónicos como tu portátil, no olvides traer un adaptador de corriente adecuado.
Planifica bien tus vuelos: Los precios de los vuelos pueden variar según la época del año. Si tienes flexibilidad en las fechas de tu viaje, aprovecha para encontrar opciones más económicas.
Empaca ropa adecuada: El clima en Irlanda es bastante impredecible, por lo que es esencial llevar ropa de abrigo y calzado resistente al agua. Así estarás preparado para cualquier cambio en el tiempo.
Tramita tu visado con anticipación: Si necesitas visado, comienza a planificar tu viaje con al menos tres meses de antelación para asegurarte de tener todo en orden.
Seguro médico: Si no eres europeo, es obligatorio contar con un seguro médico en Irlanda, ya que la sanidad no es gratuita. Este seguro te protegerá en caso de que necesites atención médica.
Solicita el PPS Number: Para poder trabajar, acceder a algunos servicios públicos o abrir una cuenta bancaria en Irlanda, necesitarás solicitar tu PPS Number.
Considera alojarte con una familia irlandesa: Si tu principal objetivo es mejorar tu inglés, vivir con una familia local te proporcionará un entorno ideal para practicar el idioma en un ambiente cotidiano y relajado.
Sumérgete en la cultura irlandesa: Aprovecha la oportunidad de hacer amigos irlandeses. Son personas muy amables que te ayudarán a conocer mejor la cultura del país y a mejorar tu inglés.